Desde el otro lado de una bola de cristal, te saludo,
Algunos de ustedes me han dicho que estas cartas siempre tienen algo de oracular. Que justo doy en el clavo con algo que están pasando en ese momento. No solo me honra este comentario, sino que le veo sentido :). Es que las historias siempre son oraculares: nos hablan de cosas íntimas que pareciera que nadie más sabe, predicen nuestro futuro a partir de la mirada que tenemos de ese porvenir y porque cualquier imagen puede ser un detonante para la creación.
Sin irme por las ramas del esoterismo, en esta carta les hablaré de cómo los oráculos son, ante todo, excelentes para contar historias. Tomemos de protagonista el tarot. Esta baraja de 78 cartas tiene arcanos mayores y menores que son, a la vez, arquetipos. Arquetipos como los de los mitos griegos. Arquetipos como los del psiquiatra Carl Jung que se basan en la personalidad: el inocente, el amigo, el héroe, el cuidador, el explorador, el rebelde, el amante, el creador, el bufón, el sabio, el mago y el gobernante.
El tarot también representa rasgos humanos, bases o puntos de partida para empezar a construir a un personaje. Nosotros a veces somos ese personaje.
A Ítalo Calvino le encantaba esta propuesta. Incluso escribió una novela, El castillo de los destinos cruzados, en la que unos viajeros perdidos cuentan sus historias a partir de la misma baraja. De ahí la importancia de la mirada al momento de narrar.
"Toda elección tiene su anverso, es decir, una renuncia, por lo que no hay diferencia entre el acto de elegir y el acto de renunciar". "Todo esto es como un sueño que la palabra lleva en sí y que, al pasar por el que escribe, se libera y lo libera". Calvino.
Yeats, Philip K. Dick, Leonora Carrington, Sylvia Plath y Borges usaron el tarot para escribir sus libros. Esto porque en la vida, como en la escritura, hay que estar tomando decisiones y suele ser más fácil si creemos en que hay una herramienta para ayudarnos a tomar la mejor de las mejores. Claramente tomaremos la que estemos capacitados para tomar según la información que tengamos en ese momento.
El escritor serbio Milorad Pavić hizo una novela para explorar cómo los destinos se entretejen mientras cada uno de sus personajes está en la búsqueda de sí mismo. El relato, cómo no, se presta para múltiples interpretaciones. Se puede leer como una tirada de tarot y trastocar el orden; a lo Rayuela, de Julio Cortázar.
“Si vas en la dirección que tu miedo crece, vas por buen camino. Y que Dios te ayude”. M. Pavic.
Un gesto animal es un oráculo que crearon los directores y directoras de talleres de escritura creativa de Idartes a partir de animales de la fauna bogotana y que propone, más que una lectura del destino, ejercicios de escritura. Aquí puedes ver las ilustraciones.
"El caballito del diablo nos recuerda que escribir es caminar en el aire. Por analogía, la tierra firme puede verse como certidumbre, y la caminata aérea, como ambigüedad. Todo ocurre en el teatro incesante del lector. La ambigüedad exige un delicado equilibrio entre lo latente y lo manifiesto. Cuando se consigue, el lector se incorpora al texto, lo vive, lo moldea, lo interpreta".
También tenemos el reciente lanzamiento de Tragaluz Editores, Ante el umbral, de Elena María Molina, para entender los arcanos mayores como caminos que se bifurcan, caminos profundos, llenos de significados.
"El Tarot evidencia los procesos vitales, el camino por donde ascendemos y descendemos, logramos propósitos, caemos en los abismos de las noches oscuras del alma, y emergemos. Y la vida se regenera, se alegra y aprendemos a mirar al cielo, a ver al otro en su cercanía y en su diferencia, a escuchar que todo nos habla, nos acoge y nos cuestiona. La única certeza que nos acompaña es que siempre habrá puertas por abrir que revelarán mundos insospechados". Elena María Molina.
Aunque me puedo quedar largas páginas citando la cantidad de libros con esta temática que se consiguen, intenté hacer una curaduría que considerara especial. Cierro entonces con dos más. Por un lado, el mazo bordador que hizo nuestra amiga Daisy o Toc Toc. ¡Adoro que se haga un tarot con los elementos y gestos del bordado!
"Navego entre lunas, cuido de mí en cada momento, observo y soy consciente de mis sentimientos, de las emociones que me hablan y me muestran su consejo. Amo mi luz y aprendo de mi singularidad, agradezco las herramientas que encontré y me permiten avanzar, abrazo, integro, sano, expando las alas y me atrevo a volar". Daissy Romero.
En Brujas literarias, que viene como libro o como set de cartas, se habla de cómo podemos hacer distintas lecturas de las personas. En este caso, se reúnen escritoras y se les busca un hilo en común: las que conjuraron la magia en su literatura. Por ejemplo, Anais Nin representa el subconsciente e invita a sumergirse en lo inexplorado. Alejandra Pizarnika, la soledad, para buscar espacio en el silencio. Convertimos así al oráculo, o a estas mujeres, en inspiración.
“¿Por qué nos atreveríamos a llamar a alguien Bruja Literaria? Porque todos los artistas son magos, y las Brujas ejercen una magia especial. Tanto las brujas como las escritoras viven en la creatividad, el misterio y otros mundos. No tienen miedo de estar solas en los bosques de su imaginación o de vivir en chozas de su propia construcción. No le tienen miedo a la oscuridad".
Ya ves, tanto el tarot como la literatura necesita ser interpretado más allá de la imagen o las palabras propuestas. Por eso se usa mucho como herramienta de autoconocimiento, pues no importa qué carta salga, somos todos los arquetipos, todas las posibilidades. La vida está llena de símbolos que nos cuestionan.
Cuando lees -un oráculo o un libro- buscas conexiones entre las metáforas, las imágenes, el texto, las experiencias vividas. De cierta forma, somos también creadores de una nueva historia para darle sentido al caos, o para ver desde otro ángulo (como invita la carta de El Colgado).
Y tú, ¿qué destino vas a crear para esta semana?
Aquí,
Jules
-Seguirme el hilo-
¿Has ido a Maloka últimamente?
Te cuento que hace un par de años estuve trabajando en el guión de la exposición interactiva "Migrar, un acto de valor" en Maloka. Es un recorrido por las dificultades que atraviesan muchos migrantes y lo cuenta la voz de una niña de una forma muy sensible y literaria. Ojalá puedas ir. Invita a tu familia y no te olvides de leer los fragmentos que aparecen en la expo ;)
Otra cosita...
>>>Lee aquí mi más reciente columna de El Espectador, en la que hablo sobre algunos de los referentes literarios que encontré en la película colombiana "Los Reyes del Mundo" que, de paso, recomiendo mucho.
"Esos momentos en que los niños se toman la carretera, el potrero o cualquier rincón en que los dejen ser eso, niños, me recuerdan a Donde viven los monstruos de Maurice Sendak: convive la inocencia con la travesura, incluso con la ira. O El señor de las moscas, de William Golding, en que también aparece la imagen de la isla, como en la toma final, y un grupo de jóvenes que, habiéndolo perdido todo, sucumbe a ciertos instintos de violencia.".
-Gaveta de recomendados-
La trama
Siendo un poco injustos, pero algo acertados, podríamos decir que Guadalupe Nettel es como la Murakami de México. Pero, claro, es ella muy única y es su propio referente. Sus cuentos los recreo siempre en mi cabeza con personajes japoneses. Será por los bonsáis, por los peces rojos, por las palabras que se esconden a pesar de las emociones intensas que se viven. Este libro lo puede conseguir aquí o suscribirse gratuitamente a Bibliored y leerlo en digital aquí. Su primer cuento, en especial, aún echa burbujas en mi pecera interior.
Telar de jardines
Una noche, la chelista Beatrice Harrison salió a su jardín a tocar su instrumento entre jacintos, rosas y albarraz. De repente, un ruiseñor (algo trasnochador) se acercó y cantó junto a ella. El dúo fue tan mágico, que unos días después, regresó acompañada de la BBC para grabar esto, pero el ruiseñor no volvió. Así que contrataron a la cantante Maude Gould para que hiciera la parte del ruiseñor. Una hermosa mentira que quedó grabada aquí.
Aguja que suena
No sé por qué hasta hoy, a mis 34, vengo a descubrir la historia orquestada de Pedro y el Lobo, del compositor soviético Prokofiev. Me encantó descubrirla porque es exactamente lo que hago cuando escucho música clásica: imagino que cada instrumento es un personaje o un instante, y que todo junto representa una historia que solo ocurre en mi imaginación. Aquí la puedes escuchar en la voz de Antonio Banderas, y aquí la puedes ver en las manos de la Sinfónica EAFIT.
Dedal de yogui
El simbolismo del tarot puede estar presente en todo, incluso en el yoga. Puede ser porque relacionamos cada arcano con una asana, o porque cada asana tiene un simbolismo e historia tan profundos que se prestan para hacer un tarot alternativo (aquí otro). Incluso, en la práctica misma podemos jugar a reproducir algunas de las figuras más emblemáticas como El Loco, La Emperatriz, El Mago, La Sacerdotisa y más.
Puntada creativa
Te cuento que este año las amigas de Salón Bordado y Bordástico hicieron una convocatoria a todxs quienes quisieran bordar una pieza que representara experiencias relacionadas con las mujeres y el trabajo, el hábitat, el medio ambiente, la salud, la educación, la participación y la paz. Las piezas se exhibieron en el SOFA y cada una tiene una historia genial detrás. Aquí puedes ver las obras y sus narrativas.
El carrete
Llegué a esta película porque la recomendaba una de mis escritoras favoritas: Samanta Schweblin. Así que era de esperarse que, además de engacharme, esta película tuviera una tensión que rayaba en la incomodidad. Me encanta que el arte pueda hacer eso con uno. Aplaudo que el director logra mostrar belleza en medio del desastre. Describo esta película como una revuelta social convertida en tragedia Shakespereana. Puedes ver "Athena" aquí. Complementa con Distancia de Rescate, la peli basada en un libro de Schweblin.
El ovillo
Quería verme este documental antes de recomendártelo. Y lo vi. ¡Y te lo recomiendo! "Dentro de la mente de un gato", en Netflix, me hizo sonreír. Independiente de que tengas o no un felino, es bueno que desmitifiquemos algunas creencias, como que un gato no se puede entrenar o que es un ser egoísta. Todo lo contrario: es una bolita de amor y habilidad.
La Labor
A propósito del anuncio de la serie basada en Cien Años de Soledad (juro que Perder el Hilo no está patrocinado hoy por Netflix y que todo es casualidad 😅), quiero contarles algo muy muy cool. Hace unos años, la Universidad de los Andes se alió con una plataforma de educación virtual llamada Future Learn para hacer un curso online gratuito sobre la obra de Gabriel García Márquez. Está en inglés y en español. ¡Y aún se puede tomar! Yo lo hice en su momento y disfruté mucho su contenido.
-Botica poética-
Poemas para adivinar el futuro
Creo que todos los poemas dicen algo de nosotros y, por lo tanto, de qué camino tomar. Elegí los siguientes versos como eligiendo la carta de un tarot. Espero que les diga algo sobre cómo conquistar al ser amado o de cómo librarse de una noche de muerte.
(Si te apetece que te recomiende algún poema para tus dolencias, solo escríbeme)
Espero, sospecho, temo, quisiera… , Pere Quart
Espero que no me mire,
que no me vea.
Sospecho que está siempre,
que no falla,
que me tiene fichado,
que no hay escapatoria.
Temo que me amenace,
que me riña,
que me castigue,
o que me espíe,
y me siga.
Me desazonan los misterios,
los oráculos,
los enigmas,
los dones, los privilegios,
los éxtasis.
Las ceremonias me desasosiegan:
el culto,
la nube sacra.
Y quisiera sentirlo y verlo
hablarle, entenderlo,
servirlo como un hombre
siempre.
Quisiera que me tomara de una vez
o que me mudase en hoja,
en cosa pura, estúpida
en silencio o aire,
en piedra,
en átomo,
de su reino toal.
Quiero amor o calma.
Lorelei, Sylvia Plath
No es noche ésta de ahogarse:
luna llena, reacio
río bajo luz suave,
acuosas nieblas bajan
tupidas como redes
cuyos dueños reposan,
traduciéndose en vidrio
lúcido mientras flotan
las torres del castillo
hacia mí hiriendo el rostro
del silencio. Ascienden
sus miembros poderosos
y álgidos, pelo grave
más que mármol, y cantan
de un mundo más amable
que ninguno. Estos cantos,
hermanas, sobrepasan
al oído gastado
que aquí, en el campo, escucha
bajo el orden impuesto.
La armonía caduca
el orden que vosotras
sitiáis con vuestras voces.
Vivís entre las rocas
de oníricas promesas
de refugio. De día
bajáis de la pereza,
de altas ventanas. Peor
que vuestro enloquecido
canto o mudez. La voz
de vuestro fondo llama:
embriaguez del abismo.
Oh río, veo tu larga
y honda línea argentina,
esas diosas de paz.
Piedra, piedra, me abismas.
-Nudo final-
La fortuna para este fin de semana ;)